viernes, 27 de julio de 2018

PROPUESTA DE REESTRUCTURACIÓN DEL EJECUTIVO DEL ESTADO SUCRE



Propuestas de Decisiones, Consideraciones y Explicaciones

La restructuración de la Administración Pública Estadal, y más específicamente del ejecutivo regional, es una facultad otorgada al Gobernador del Estado Sucre en los Artículos 116 y 117, numerales 6, 12, 15 y 23 de la Constitución del Estado Sucre.

En tal sentido, a efectos de la acción administrativa conducente a la implementación del contenido de esta propuesta se sugiere la elaboración de un Decreto en el que se dicten los aspectos generales del proceso de reestructuración del aparato de estado regional, y posteriormente ir dictando decretos para determinar los procedimientos de ajustes necesarios en la transición de la forma actual a la que resulte de los cambios aquí sugeridos.

1. Se propone la eliminación de la Secretaría Privada del Gobernado por cuanto no está contemplada en la Constitución del Estado Sucre, la cual, en sus Artículos 123 y 124 contempla sólo las instancias de la Secretaría General de Gobierno y las Direcciones.  Adicionalmente, la figura de la Secretaría Privada genera duplicidad de funciones con la asistencia ejecutiva y con la propia Secretaría General de Gobierno.

2. En la propuesta de Organigrama se coloca en su justa dimensión al Consejo Estadal de Planificación y Coordinación de Políticas Públicas, presidido por el Gobernador, pero que adicionalmente debe contar con una secretaría ejecutiva.  Esta instancia debe asumir las funciones que le corresponden en cuanto a la formulación de planes, proyectos y programas de políticas públicas, a efectos de lo cual se propone convertir las actuales Oficina de Proyectos y Oficina de Evaluación y Seguimiento en coordinaciones dentro del Consejo Estadal de Planificación y Coordinación de Políticas Públicas.

3. Se propone la creación de la Dirección del Despacho en la cual se puede incluir además de la figura del Director o Directora, la del (a) Asistente Ejecutivo (a), que actualmente está como eslabón suelto dentro de la estructura, el cual estará al servicio del Gobernador (a) aunque administrativamente dependiente de la Dirección del Despacho.

3. Se propone la Creación de la Unidad de Auditoría Interna con rango de Dirección con las mismas funciones y estructura que presenta actualmente, en apego a la Ley que rige la materia.

4. Se propone la creación de la Unidad de Comisión de Contrataciones con rango de Dirección, no existente actualmente como instancia orgánica sino como comisión ad hoc, lo cual hasta ahora ha resultado poco efectivo puesto que las actividades derivadas de las funciones de contratación terminan recayendo en la Consultoría Jurídica, afectando tanto las actividades propias de esa Dirección como la eficiencia de la Comisión de Contrataciones.

5. Se propone que en el Decreto se precise a creación como órganos del ejecutivo de cada una de las Direcciones a fin de que estas puedan ejercer la personalidad jurídica plena que le corresponde en cuanto a Órganos como tal.  En dicho sentido se propone la creación de:
- Dirección de Administración y Servicios Generales, preservando las funciones de la actual Dirección de Administración, anexándole las funciones de Sistemas y Soporte Técnico de la actual Dirección de Informática y Telecomunicaciones, funciones que pasarían a ser asumidas por una División de Sistema y Soporte Técnico.  Adicionalmente se propone adscribir a esta Dirección, la Tesorería General del Estado y el Servicio Autónomo Bolivariano de Administración Tributaria del Estado Sucre (SABATES).
- Dirección de Presupuesto con las funciones de programación presupuestaria, ejecución presupuestaria y seguimiento presupuestario, eliminando la función de planificación, que debe estar a cargo del Consejo Estadal de Planificación y Coordinación de Políticas Públicas.
- Dirección de Personal (o de Gestión de Talento), la cual preserva la forma y funciones de la Actual Dirección de Personal, y además se le adscribe formalmente el Fondo de Jubilaciones y Prestaciones de los Trabajadores del Estado Sucre.
- Dirección de Política Comunicacional, la cual preserva forma y funciones de la Actual Dirección de Política Comunicacional, agregándose las funciones en materia de telecomunicaciones que viene desempeñando la Dirección de Informática y Telecomunicaciones, así como adscribiéndole formalmente la Imprenta del Estado, SU RADIO y SU TV.
- Dirección de Política Institucional, Protocolo y Eventos, la cual preserva nombre, forma y funciones de la actual Dirección.
- Dirección de Consultoría Jurídica con la misma forma, funciones y nombre de la Dirección Actual.
Todas estas Direcciones se conformarían en el Nivel de Apoyo de la estructura de gestión de la Gobernación.

6. En el Nivel Sustantivo, es decir, de la gestión proyectada a las políticas públicas se propone la creación de:
- Dirección de Economía Productiva, como órgano del Ejecutivo encargado del diseño, coordinación, supervisión y rectoría de las políticas de estímulo a la economía productiva en todos los sectores.  Se propone la supresión de la Oficina de Minas, de la Oficina de Desarrollo Agrario del Estado Sucre (ODAS) y de la Oficina de Relaciones Exteriores y Comercio, cuyas funciones se integrarían en el nuevo órgano y/o serían asumidas por los Entes ya existentes y en plena operacionalidad.  Se propone también la adscripción de todos los entes del área económica productiva como CORPOMIN y CORSOTUR, así como de una Corporación Agrícola y Pesquera que fusione a FONDADES y FIDAES, y una Corporación de Desarrollo Industrial y Comercial que fusione a COSDESU y FUNDES.  Cabe destacar que desde hace años FUNDES no viene desarrollando las competencias que tiene atribuidas, las cuales coinciden con las de COSDESU.
- Dirección de Participación y Protección Social, como órgano del Ejecutivo encargado del diseño, coordinación, supervisión y rectoría de las políticas de participación protagónica del pueblo organizado y de protección del pueblo a través de los programas sociales.  Se propone adscribir a esta Dirección todos los entes del área social como FAJES, FUNDAISU, FUNDAGER e INSOMUJER.  Se propone crear un Instituto de Participación y Protección Social que fusione FUNDESOES, FUNRECOSOES, UNIPSO-FUSES y Gabinete Intermisiones, como ente adscrito a esta Dirección.  Del mismo modo se propone fusionar la Fundación Niño Simón con el SAPINAES, manteniendo el nombre y personalidad de la primera, dado que la misma existe en el resto de las entidades federales como política nacional.  Se propone la fusión de FUNDESU y FUMIDES en un Instituto de Deportes del Estado Sucre, adscrito a la Dirección de Participación y Protección Social.
- Dirección de Educación, con la misma personalidad, forma y funciones que tiene actualmente, adscribiéndosele la Asociación Civil “Simoncitos Comunitarios”, el SENIFA y el Fondo de Jubilaciones y Prestaciones Sociales de los Educadores del Estado Sucre.
- Dirección de Cultura, con la misma personalidad, manteniendo las funciones que actualmente desarrolla, y absorbiendo directamente las Funciones de FUNDAPATRIMONIO, la cual pasaría a ser una Subdirección o División, que podría perfectamente seguir funcionando en su sede actual, la “Casa Alarcón”.  En el campo de la cultura se recomienda corregir la dispersión y autonomía política reinante en las instituciones de Cultura, respecto a la rectoría Nacional y Regional de la materia, para lo cual se sugiere suprimir las múltiples Fundaciones que existen actualmente y Crear, mediante el Decreto de re-estructuración, un Servicio Autónomo o Instituto de Teatros, Ateneos y Escuelas Culturales del Estado Sucre, como ente adscrito a la Dirección de Cultura.  Del Mismo Modo se propone la supresión de la múltiples Fundaciones que actualmente hacen vida como entes del ejecutivo en materia de museos y proceder a la creación de una Sola Fundación que rija todos los Museos Públicos del estado y realice la supervisión de los museos privados y semiprivados en términos de su apego a los lineamientos que en materia museística dicte el Ministerio del Poder Popular para la Cultura y la Dirección de Cultura del Estado Sucre.  Asimismo se propone la creación del Servicio Autónomo de Bibliotecas Públicas del Estado Sucre, con la misma personalidad, forma y funciones del actual Servicio Autónomo.
- Dirección de Salud, con lo cual se eleva el rango de la instancia regional de Salud al nivel de Órgano.  No haría falta conformar un equipo de la Dirección puesto que se puede establecer como práctica que el Director de Salud sea siempre y al mismo tiempo, presidente del Ente adscrito FUNDASALUD.
- Dirección de Infraestructura y Servicios, para sustituir a la Dirección de Obras Públicas Estadales como órgano del ejecutivo en la materia.  Este nuevo órgano, tendría bajo su adscripción a los Entes: Servicio Autónomo de Aeropuertos del Estado Sucre (SAAES), Puertos de Sucre, C.A., FUNREVI, FUNDAMBIENTE, así como a CORPOSUCRE, ente que fusionaría a SAVES, UCERSA, Fundación Nuevo Rostro y la EPS Mariscal Sucre.
- Dirección de Seguridad Ciudadana, como órgano de la Gobernación encargada de la coordinación de las políticas públicas en materia de seguridad.  Se propone la supresión de la Oficina de Prevención del Delito, la cual pasaría a ser una subdirección o División dentro de la Dirección de Seguridad Ciudadana.  Se sugiere asimismo adscribir a esta Dirección, el IAPES, Fundación RAICS-PC y Fundación Guardianes del Golfo.

Si se toma en cuenta la cantidad actual de instancias que en la práctica integran al tren ejecutivo de la Gobernación estaríamos hablando de al menos 61 Directores y Directoras, Presidentes o Presidentas de órganos y entes.  Con la propuesta actual el número se reduce considerablemente a 49, de los cuales sólo 18 serían formalmente parte del Tren Ejecutivo de la Gobernación, dándose tal rango sólo a los órganos mientras que los entes quedarían subordinados a sus respectivos órganos de adscripción.

lunes, 9 de julio de 2018

El IV Congreso del PSUV y la doctrina socialista sobre Economía Política

En el marco del debate propiciado por el IV Congreso del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) y con el ánimo de ofrecer un aporte militante, me he dado a la tarea de analizar los documentos que ha elaborado la Comisión Nacional Organizadora del referido congreso a fin de elevar a la consideración de la militancia convocada al debate propuestas animadas por el afán de que enrumbemos nuestro partido por la ruta del socialismo científico en lugar de rutas pragmáticas, de mercado o revisionistas que, lejos de acercarnos al socialismo como proyecto concreto nos puedan alejar de él.
A propósito de esto, el Documento titulado POR EL TRIUNFO DE LAS FUERZAS REVOLUCIONARIAS EN LA CONSTRUCCIÓN DEL SOCIALISMO BOLIVARIANO (PAPEL DE TRABAJO), publicado en el Boletín Nº 116 del PSUV, dedicado a su IV Congreso, entre las tareas fundamentales señaladas para la etapa actual de la revolución, figura en el documento con el número 3, Construcción del Nuevo Modelo Económico-Productivo Socialista como Garantía de la Igualdad Social. No obstante, se observa que podría estarse anteponiendo el orden de operacionalización de la política a desplegar para lograrlo, privilegiando el “desarrollo de las fuerzas productivas” y subordinando la transformación de las relaciones de producción. Así se nos plantea en el documento:
El Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) define como tarea central para la consolidación del Socialismo Bolivariano la construcción de sus bases materiales, a partir de la cual avanzar en la estabilización, el crecimiento y la prosperidad del país; tarea para cuya consecución resulta fundamental el desarrollo de las fuerzas productivas de la Nación.
En tal sentido, continuará impulsando, junto al Gobierno Bolivariano, la concepción de desarrollo contenida en el Proyecto Nacional Simón Bolívar, de manera firme e inalterable, poniendo especial interés en emprender los cambios estructurales orientados a profundizar en materia de innovación científico-técnica, como herramienta principal para elevar la eficacia de la producción, con énfasis en los bienes de primera necesidad y la optimización en la prestación de los servicios públicos.
Ahora bien, al remitirnos a la teoría científica socialista verificamos que al hablar de “bases materiales” se hace referencia tanto a los elementos del proceso de trabajo, es decir la fuerza de trabajo y los medios de producción (recursos de la naturaleza y medios de trabajo), como a las relaciones de producción; todo ello forma la base material de la sociedad, y de ellos la combinación de “fuerza de trabajo” y “medios de producción” es lo que se conoce como “fuerzas productivas”. Pero pasa que las relaciones de producción son fundamentales para que las fuerzas productivas (fuerza de trabajo, materia prima y medios de trabajo) se desarrollen o se estanquen.
El marxismo explica que las relaciones de producción en un momento determinado entran en contradicción con el desarrollo de las fuerzas productivas, convirtiéndose en una traba a dicho desarrollo, y provocando crisis revolucionarias que dan paso a nuevas etapas histórico-sociales en las que nuevas relaciones de producción suplantan a las viejas, destrabando así o liberando las fuerzas productivas del freno que les impedían seguir desarrollándose, hasta que esas nuevas relaciones van alcanzando sus límites (van haciéndose viejas, caducando) y entran en contradicción nuevamente con el desarrollo de las fuerzas productivas.
Es así como se explica que desde las entrañas de la sociedad gentilicia surgieran las contradicciones que fraguaron el surgimiento de las relaciones esclavistas de producción y éstas suplantaran a aquellas, provocando el cambio en toda la formación socioeconómica, tal como ocurrió en el seno de la sociedad esclavista para que se abrieran paso las relaciones feudales de producción, y tal como ocurrió en el seno de la sociedad feudal para que surgieran las relaciones capitalistas de producción para sustituir a las relaciones feudales, liberando como nunca antes el desarrollo de las fuerzas productivas.
Y es así como el marxismo ha demostrado, desde tiempo de Marx hasta nuestros días, que las relaciones capitalistas de producción ya caducaron y hoy son una traba al desarrollo de las fuerzas productivas, razón por la cual, la forma en que esta formulada la citada línea política en los documentos del IV Congreso del PSUV adolece de rigor teórico, a menos que se parte de la premisa de que en las condiciones periféricas y dependientes del capitalismo venezolano aún no hemos agotado todas las posibilidades de desarrollo de las fuerzas productivas a lo interno del país, cosa que la realidad histórica de toda América Latina contradice.
En virtud de lo expuesto se propone una modificación al texto a fin de poner el planteamiento en consonancia con la doctrina del partido en materia de economía política, de la forma siguiente:
El Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) define como tarea central para la consolidación del Socialismo Bolivariano la construcción de sus bases materiales, a partir de la cual avanzar en la estabilización, el crecimiento y la prosperidad del país; tarea para cuya consecución resulta fundamental la expansión de las relaciones productivas socialistas y el desarrollo de las fuerzas productivas de la Nación.
En tal sentido, continuará impulsando, junto al Gobierno Bolivariano, la concepción de desarrollo contenida en el Proyecto Nacional Simón Bolívar, de manera firme e inalterable, poniendo especial interés en emprender los cambios estructurales orientados a profundizar en materia de impulso a las formas de propiedad social y de innovación científico-técnica, como herramientas principales para elevar la eficacia de la producción, con énfasis en los bienes de primera necesidad y la optimización en la prestación de los servicios públicos.
Así redactado, de una forma similar, queda enfatizada la línea política de invertir en la modernización de los medios de trabajo, pero dejando claro que sin sustituir las caducas relaciones productivas capitalistas no será posible que las fuerzas productivas se desarrollen en la dirección que requiere el rumbo socialista de la sociedad.
Este punto es de vital importancia porque, tal como está formulada en los documentos la tarea concreta que se deriva de esa línea política es financiarle a la burguesía la modernización de sus bienes de capital, es decir, convertir el esfuerzo financiero de toda la nación en capital privado, y ya en Venezuela sabemos bastante bien que hace la burguesía contra el pueblo con el capital que forma con ayuda del Estado. Con la modificación propuesta, la tarea derivada de la línea política sería invertir en dotar principalmente a empresas públicas y de propiedad comunal (directa e indirecta) del equipamiento productivo necesario para elevar la producción nacional, por supuesto sin obviar a la empresa privada, solo que no sería la principal y primera opción.

¿Cuál era la opinión de Chávez? Al respecto el Comandante Hugo Chávez, Líder Eterno y Presidente Fundador del Partido, tomando una frase del Che, según la cual “No se puede construir el socialismo con las armas melladas del capitalismo”, enfatizando el comandante que “no se puede compañeros, no seamos tercos, no se puede”; y precisamente las armas más melladas del capitalismo son sus relaciones de producción, caducas desde mediados del siglo XIX. 

Propuestas de Modificaciones a los documentos fundacionales del PSUV. Temas para el IV Congreso


Con el ánimo de contribuir al debate sobre los cambios necesarios a lo interno del PSUV, tanto en el ámbito de lo organizativo como en lo relacionado con la consolidación de sus aspectos teóricos y programático se eleva a la consideración de las bases y el resto de las instancias decisorias del IV Congreso, estas modestas propuestas, resultantes de una relectura crítica de los documentos fundacionales del Partido, a la luz de la práctica política de estos cuatro años transcurridos desde el III Congreso, como directivo en instituciones del Estado, militante del partido y Directivo del Partido en el ámbito municipal.

I. Declaración de principios

En el primer párrafo del apartado Nº 1 “LA AMENAZA IMPERILISTA” de la Declaración de Principios se afirma que:

El capitalismo en la fase imperialista ha tocado sus límites y se ha reafirmado, con sus políticas de desarrollo neoliberales y su modelo de influencia mediática, como el principal enemigo de la humanidad”.

Sin embargo desde el punto de vista científico no hay razón para tal afirmación, sino que por el contrario, al decir de István Meszaros ha demostrado una gran capacidad de resiliencia, ensanchando sus límites, a costa de la el aumento de los sufrimientos de los pueblos del mundo, del consumo destructivos de los recursos de la naturaleza, sus políticas neoliberales y su poder mediático. En tal sentido se propone cambiar la redacción de la oración citada de la forma siguiente:

...El capitalismo en la fase imperialista ha venido ensanchando sus límites a costa del aumento del sufrimiento de los pueblos del mundo y del consumo destructivo de los recursos de la naturaleza, reafirmándose, con sus políticas neoliberales y su modelo de influencia mediática, como el principal enemigo de la humanidad...

En el párrafo cuatro del mismo apartado se incurre en una concesión al eurocentrismo al calificar las dos guerras europeas del siglo XX como mundiales, asumiendo que esa parte del mundo es todo el mundo:

Sólo que con el actual grado de desarrollo de la ciencia y la tecnología, a diferencia de las dos conflagraciones mundiales ocurridas durante el siglo XX, la guerra no se limitaría a destruir vidas humanas, culturas y bienes para permitir que puedan nuevamente ser producidas y vendidas: acabaría con toda forma de vida sobre la tierra.”

Se propone modificar la redacción de la forma siguiente:

Sólo que con el actual grado de desarrollo de la ciencia y la tecnología, a diferencia de las dos conflagraciones europeas ocurridas durante el siglo XX...

En el Apartado Nº 2 “CRISIS DEL CAPITALISMO MUNDIAL”, párrafo cuarto no esta bien formulada la contradicción de la que se hace mención:

El sistema ha tendido a hacerse cada vez más parasitario y expoliador y esto se expresa en la contradicción creciente entre la preponderancia del dinero y el mercado (valor de cambio) y la producción de bienes y servicios para atender necesidades reales (valor de uso), con lo que cada vez existe menor posibilidad de satisfacer esas necesidades”

Para hacer mas inteligible la contradicción que se pretender señalar se propone modificar la redacción en los siguientes términos:

El sistema ha tendido a hacerse cada vez más parasitario y expoliador, lo cual se expresa en la contradicción creciente entre la preponderancia del dinero y el mercado (valor de cambio) y el decrecimiento relativo de producción de bienes y servicios para...

En el apartado Nº 3 TERMINAR CON EL CA PITALISMO y CONSTRUIR EL SOCIALISMO PARA
ACABAR CON LA POBREZA E IMPLANTAR LA JUSTICIA SOCIAL, en el quinto párrafo se hace referencia al logro de aumentar la matrícula de “educación superior”, término superado por la revolución debido al contenido clasista y excluyente que portaba. Por ello se sugiere actualizar la redacción para referirlo como educación universitaria.


En el apartado Nº 8 ORIGINAL Y CREATIVO se asienta:

Siguiendo la máxima de Simón Rodríguez, “inventamos o erramos”, el Socialismo Bolivariano por el que lucha el Partido, será original, propio, creativo y con un profundo sentido colectivista del ejercicio del poder, que busca construir una superestructura que sirva de soporte al modelo económico socialista, orientando y direccionando al mismo tiempo políticas congruentes con el sentido de identidad de nuestro pueblo y su historia para la preservación de nuestra naturaleza.”

Redactado de esa forma se cambia el papel explicado por el socialismo científico que ejerce la base económica y la llamada superestructura, puesto que se sugiere que la superestructura sirve de soporte a la base económica. Para corregir esa impresición teórica se sugiere una modificación en los téminos siguientes:

(…) que busca erigir una superestructura que refuerce y dé cohesión al modelo económico socialista (…)

En el apartado sobre los PRINCIPIOS FUNDAMENTALES, al parecer se coló un error de tipeo porque se hace referencia a la “teoría de la liberación”, cuando en contextos similares anteriores se menciona es la teología de la liberación, por lo que se sugiere la corrección en tal sentido.

II. Estatutos del Partido Socialista Unido de Venezuela

Se propone de acentuar el carácter socialista de la democracia propugnada por el Partido, distinta a la forma de democracia burguesa, aún viva en el ideario de muchos militantes del PSUV. A tal efecto se propone agregar dicha cualidad en la redacción del ARTICULO 3. PROPÓSITO U OBJETO, donde se lee:
El propósito fundamental del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) es la construcción del Socialismo Bolivariano, la lucha antiimperialista, anticapitalista y la consolidación de la democracia bolivariana, participativa y protagónica (…)

Para que quede de la forma siguiente:

El propósito fundamental del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) es la construcción del Socialismo Bolivariano, la lucha antiimperialista, anticapitalista y la consolidación de la democracia socialista bolivariana, participativa y protagónica (…)

Por otra parte, el desarrollo de las dinámicas del partido ha vertido sobre el método de la cooptación una especie de satanización producto de la insuficiente profundización de la necesaria caracterización de la democracia socialista en oposición a la democracia burguesa, y en parte también por el mal uso que en muchas ocasiones se hace del método de la cooptación. Es importante no perder de vista que la democracia burguesa, con sus elecciones parecidas a concursos de popularidad, basados en la capacidad financiera y logística de unos por encima de otros, puede generar resultados más nefastos que cualquier ejercicio de cooptación. En tal sentido se propone agregar al subtítulo del ARTÍCULO 6 el término SOCIALISTA a fin de cualificar nuestro tipo de democracia interna, para que quede de la siguiente forma:

ARTÍCULO 6. MÉTODOS DE LA DEMOCRACIA SOCIALISTA INTERNA

Del mismo modo se propone modificar el Parágrafo Único del Artículo 6 para delimitar el uso del método de cooptación a instancias colectivas (colegiadas) y no a instancias individuales, de la forma siguiente.

Parágrafo Único. El método de cooptación sera aplicado excepcionalmente y previa autorización del Presidente del Partido, de manera exclusiva por instancias colectivas de Dirección, debidamente constituidas, con quórum válido calificado de dos tercios de sus integrantes y con decisiones de consenso.

Se propone iniciar el proceso para trascender la vieja forma territorial heredada de la IV República, específicamente en lo atinente a las parroquias, las cuales ya no operan como nivel político-administrativo, por lo que no tiene sentido persistir en su supervivencia a lo interno del PSUV. Por el contrario debe darse preeminencia a la nueva geometría del poder que propugna el Partido y a las nuevas formas y niveles territoriales que se han venido estructurando al calor de la lucha de los últimos años.

En tal sentido se propone modificar el Artículo 15 sobre la distribución territorial de los órganos del partido, de la forma siguiente.

ARTÍCULO 15: DISTRIBUCIÓN TE RRITORIAL DE LOS ÓRGANOS DEL PARTIDO

El partido se organiza territorialmente en patrullas socialistas, equipos políticos comunitarios socialistas, equipos políticos comunales socialistas, equipos políticos municipales socialistas, equipos políticos estadales socialistas, regiones socialistas y la Dirección Política Nacional.

Parágrafo Único. De cara a los procesos electorales para cargos de elección popular los responsables en materia electoral de los equipos políticos comunitarios socialistas conformarán las Unidades Bolívar Chávez con base en el punto y círculo de cada centro de votación. La Dirección Política Nacional del Partido determinará su organización para cada coyuntura electoral.

En esa misma línea se propone la supresión del ARTÍCULO 22. LA UNIDAD BOLÍVAR CHÁVEZ, puesto que tal como está no solo contradice parte del texto vigente de Los Estatutos, sino que desde el punto de vista territorial esa instancia no encarna ninguna realidad sociocultural distinta al mero acto electoral, es decir, no representa ninguna dimensión o escala territorial en el ideario de la población ni de la propia militancia. En todo caso, lo que se requiere que quede establecido sobre las UBCH como forma contingencial de organización para eventos electorales ya queda señalado en la propuesta de Artículo 15.

Se propone redactar un nuevo Artículo 22 para definir el equipo político comunitario en términos similares al como se define el equipo político comunal y el resto de los niveles territoriales en el Artículo 23 y siguientes.

Se propone eliminar la referencia a los equipos políticos parroquiales en el Artículo 24

III. Bases Programáticas del Partido Socialista Unido de Venezuela

En el Apartado que lleva por título: TRANSFORMAR LA POLÍTICA EN UN OFICIO NOBLE PARA LA VIVENCIA VITAL, PLENA, DIGNA Y GRATIFICANTE Y LA DEMOCRACIA EN UN ESPACIO PARA LA PARTICIPACIÓN Y EL PROTAGONISMO POPULAR, se lee lo siguiente:

En este ámbito de la lucha contra la dominación política en la etapa de transición, necesitamos un Estado fuerte que vaya asumiendo progresivamente diversas esferas de la economía y la vida social y cultural. La lucha contra la dominación política requiere del Estado para el apalancamiento del poder popular y garantizar que la nueva institucionalidad se consolide bajo el signo de la participación popular, de nuevas organizaciones marcadas por la comuna y los consejos de los diferentes sectores sociales (trabajadores, estudiantes, mujeres, indígenas, etc.). Surgirá así un nuevo Estado socialista dirigido por y al servicio del pueblo, que terminará por desplazar el viejo Estado burgués1.

Tal como está planteada la idea, esa línea política entra en franca contradicción con postulados teóricos del socialismo científico según los cuales: “la clase obrera no puede limitarse simplemente a tomar posesión de la máquina del Estado tal y como está y servirse de ella para sus propios fines” (Marx) sino que debe destruirla y sustituirla con un Estado del tipo de la Comuna. Es decir que el plan no debería ser fortalecer al Estado Burgués para que éste vaya estructurando al Estado de la Comuna sino que se sustituya en breve tiempo el Estado Burgués por el Estado de la Comuna, y desde esa nueva forma política (el estado de la transición del capitalismo al socialismo) es que surgirá un nuevo Estado, no ya el de la transición del capitalismo al socialismo sino una ya plenamente socialista.

En dicho sentido se sugiere replantear el contenido del párrafo citado de la forma siguiente:

En este ámbito de la lucha contra la dominación política en la etapa de transición, necesitamos un Estado Transicional fuerte que asuma en el corto y mediano plazo diversas esferas de la economía y la vida social y cultural. La lucha contra la dominación política requiere del Estado Comunal para el apalancamiento del poder popular y garantizar que la nueva institucionalidad se consolide bajo el signo de la participación popular, de nuevas organizaciones marcadas por la comuna y los consejos de los diferentes sectores sociales (trabajadores, estudiantes, mujeres, indígenas, etc.). Surgirá así un nuevo Estado socialista dirigido por y al servicio del pueblo, que terminará por desplazar toda forma de Estado basada en la división y dominación de clase.

En este punto es importante no perder de vista que las Comunas como células deben ser funcionales más que metas administrativas. A ese respecto la meta de las 3000 comunas debe ser analizada desde el punto de vista cualitativo y no como meta numérica a cumplir, y mucho menos como distribución aritmética de “tantos consejos comunales en el país, a razón de tantos por cada comuna= 3000 comunas. Por el contrario debe corregirse la práctica de seccionar espacios humanos con identidad sociocultural, partiendo de la falsa premisa de que una comuna con 20, 30 0 40 consejos comunales no funcionará. Esa premisa solo es cierta en casos en los que se agrupa a comunidades de espacios socioculturales distintos, sin identidad sociocultural, pero espacios como el 23 de enero, Los Magallanes de Catia, Casalta, en Caracas; La Llanada y Brasil, en Cumaná; Los Godos, Los Guaritos, Las Cucuizas, La Pica, en Maturín, entre otros, por sus características geohistóricas y socioculturales pueden funcionar perfectamente con una única Comuna, independientemente de que cuenten con 30, 40, 50 o más consejos Comunales. Y no sólo eso, sino que solo preservando esa unidad geoespacial y sociocultural se podrán acopiar las capacidades económicas necesarias para que además de política y socialmente funcionales también lo sean desde el punto de vista de la necesaria viabilidad y sustentabilidad económica. Las líneas políticas del Partido deben contemplar la funcionalidad de la Comuna en tales términos.

En el cuarto párrafo del Apartado dedicado a “EL CAPITALISMO”, se lee:

El capitalismo es la etapa histórica en que la sociedad se organiza en torno a la expropiación y explotación del trabajo ajeno, la cual requiere la dominación política y cultural sobre las trabajadoras y trabajadores asalariados y la disolución de los nexos comunitarios de las formaciones precapitalistas que ahora aparecen ante el individuo como un simple medio para lograr sus fines privados. La base material sobre la que se levanta el orden burgués capitalista es la estructura económica constituida por relaciones sociales de producción basadas en la explotación que dan lugar a formas de propiedad y de acumulación privadas.

Lo cual es tan cierto en referencia al capitalismo como lo es también para todas las formaciones socioeconómicas basadas en la división y explotación de clase. Por tanto el párrafo citado no aporta nada en cuanto a caracterización particular del capitalismo, sino que por el contrario oscurece teóricamente su comprensión al atribuirle como características específicas, aspectos que son generales de todas las sociedades de clase. En tal sentido se propone suprimir todo el párrafo, lo cual no le resta nada a la exposición precedente, o sustituirlo por una ampliación de la caracterización general del capitalismo, a fin de complementar lo que se viene explicando en párrafos previos.

En el Apartado “BASES DEL MODELO PRODUCTIVO DE LA TRANSICIÓN AL SOCIALISMO”, específicamente en el numeral 1 del literal A- , se plantea como medida para alcanzar unas relaciones sociales de producción dirigidas a la humanización de los procesos de trabajo, la siguiente:

1. Reducción progresiva y creciente hasta su eliminación definitiva de la explotación del trabajo ajeno, es decir, reducción progresiva hasta su eliminación definitiva de la tasa de plusvalía. [Excedente de explotación].

La cual forma parte del programa histórico del anarquismo, y fue combatida de manera enérgica y fundamentada tanto por Marx y Engels, como por Lenin, puesto que éstos entendían que en las sociedades socialista y comunista sería necesario el aporte consciente de una tasa de plustrabajo (plusvalía) a la sociedad para garantizar los medios materiales y espirituales destinados a sostener a la parte no productiva de la población, por razones de edad, tiempo de formación en las edades tempranas, enfermedad, discapacidades, así como para sustentar los fondos necesarios para aumentar las capacidades sociales de producción con miras a la satisfacción de las necesidades crecientes de la población, a fin de pasar del reino de la necesidad al reino de la libertad. Este aspecto es parte fundamental de la conciencia del deber social de los individuos para con la sociedad y de ésta para con los individuos que la integran.

Para sustituir esa propuesta de medida, más propia del anarquismo que del socialismo científico, se propone incluir una reivindicación histórica del socialismo científico, como es la supresión paulatina del trabajo asalariado, relación social ésta que es la base sobre la que reposa el capital. Esta medida, ausente en la doctrina del partido, debe ser incluida ya que desde el punto de vista teórico socialista no es concebible avanzar al socialismo sin establecer la forma específica de relación que medie la reproducción de las condiciones de vida digna de los y las trabajadoras, que no puede ser el salario. Esclavismo, Servidumbre y Salario son las formas de relación social que han servido para la explotación económica de unas clases sobre otras en cada etapa histórica determinada y ninguna de ellas le ha de servir al socialismo para sentar sus bases materiales. En ese sentido se debe caracterizar esa relación social productiva que es el trabajo asalariado (el salario) y oponerle una relación nueva, de tipo sustentarial, que denote la solidaridad Sociedad-Individuo-Sociedad que comporta la conciencia del deber social. Al redactarla se puede dejar claro que programáticamente se iniciará su implantación con la fuerza trabajadora que está al servicio del Estado y en la economía comunal, y luego se irá extendiendo al resto de la economía.

Se propone la siguiente forma de enunciarla:

1. Supresión paulatina del trabajo asalariado y su expresión, el salario, como relación social productiva propia del capitalismo, y su sustitución por una relación sustentarial entre la sociedad y los individuos que garantice a los y las trabajadoras una vida digna material, moral y espiritualmente, iniciando su implementación por el Estado y el sistema económico comunal, para su posterior extensión al resto de la economía.

En el Apartado “BASES DEL MODELO PRODUCTIVO DE LA TRANSICIÓN AL SOCIALISMO”, específicamente en el Ordinal II “Ruptura de la dependencia”, numeral 5 del literal C- “Organización de la producción: Ruptura de los mecanismos de saqueo imperialistas”, se lee lo siguiente:

5. Hay que tomar conciencia que para romper la dependencia es necesario producir los equipos, las tecnologías, los servicios y el capital que requiere el proceso productivo, por un lado, y por el otro, cambiar los patrones de consumo y culturales profundamente arraigados que determinan la producción.

En tal formulación se usa la categoría “capital” para referirse a los recursos financieros. Tal uso, propio de la economía capitalista no contribuye a la justa comprensión del capital como relación social, en los términos en que ha sido definida en las propias bases programáticas analizadas. Por tal razón se propone sustituir en la redacción del postulado comentado el término “capital” por el término más preciso de “los recursos financieros”.

En ese mismo Apartado, Literal y Ordinal, específicamente en el numeral 10 se lee lo siguiente:

10. Desarrollo del sector tecnológico a partir de un replanteamiento del paradigma de ciencia y tecnología que permita recuperar nuestras propias experiencias, vivencias, saberes y anhelos, redefiniendo los criterios de productividad en su relación con el bienestar social o la acumulación de capital.

Al parecer, la antecedente formulación sufrió un error de transcripción ya que el sentido que se interpreta es que el criterio de productividad que se promueve está en “relación con el bienestar social o la acumulación de capital”, de donde se desprende que bienestar social es igual a acumulación de capital. Por ello se propone una leve enmienda que permita precisar el sentido correcto, de la forma siguiente:

Desarrollo del sector tecnológico a partir de un replanteamiento del paradigma de ciencia y tecnología que permita recuperar nuestras propias experiencias, vivencias, saberes y anhelos, redefiniendo los criterios de productividad en su relación con el bienestar social, en lugar de la acumulación de capital.
1 . Todos los subrayados nuestros

miércoles, 27 de junio de 2018

El PSUV y la teoría revolucionaria del Estado. Temas para el IV Congreso

Para toda revolución socialista que se precie de tal, la clarificación y comprensión de la teoría sobre el Estado es una herramienta indispensable a la hora de enfrentar los grandes retos que significan cada paso en la superación de la transición del capitalismo al socialismo. A pesar de ello, asombra que sobre ese tema poco se habla, poco se orienta y al parecer por los discursos y las reflexiones de altos dirigentes revolucionarios a escala nacional y regionales, poco se sabe, al punto que muchas veces, tales discursos y reflexiones son abiertamente contrarios a los postulados de la teoría socialista científica sobre el Estado.
Si nos remitimos a los documentos fundacionales del PSUV, tanto en la declaración de principios (apartado: PRINCIPIOS FUNDAMENTALES) como en las bases programáticas y los estatutos (Artículo 4 y 11) se consagra la asunción del ideario de Bolívar y el bolivarianismo, de Ezequiel Zamora, Simón Rodríguez, los aportes de lucha y organización de los pueblos indoafroamericanos, el cristianismo originario, la teología de la liberación, el socialismo científico, el pensamiento universal crítico y humanista, la equidad y la igualdad de género y el ecologismo entendido como la obligación ética de construir un modelo respetuoso de la vida y de la madre tierra que garantice la sobrevivencia de la humanidad.
Basten esas referencias para tener claras las fuentes a donde debe acudirse para esclarecer las premisas teóricas que han de guiar la práctica social, política y económica de los y las revolucionarias socialistas, y muy específicamente en lo atinente al Estado. En tal sentido hay que señalar con entera firmeza que de esas fuentes sólo el socialismo científico cuenta con una doctrina ampliamente fundamentada y confirmada por la experiencia histórica en cuanto a la exactitud de sus tesis, tal como se reconoce en el Artículo 11 de los referidos estatutos al proclamar “el marxismo como base para el análisis dialéctico de las experiencias humanas”. Ahora bien ¿cuales son las premisas teóricas del marxismo, del socialismo científico, sobre el Estado? Por ejemplo, Federico Engels, en su obra El origen de la familia, la propiedad privada y el Estado, lo define como:
Un producto de la sociedad cuando llega a un grado de desarrollo determinado; es la confesión de que esa sociedad se ha enredado en una irremediable contradicción consigo misma y está dividida por antagonismos irreconciliables, que es impotente para conjurar. Pero a fin de que estos antagonismos, estas clases con intereses económicos en pugna no se devoren a sí mismas y no consuman a la sociedad en una lucha estéril, se hace necesario un poder situado aparentemente por encima de la sociedad y llamado a amortiguar el choque, a mantenerlo en los límites del "orden". Y ese poder, nacido de la sociedad, pero que se pone por encima de ella y se divorcia de ella más y más, es el Estado (…)
Carlos Marx en su obra La Guerra civil en Francia, en la que, sobre la base de la experiencia de la Comuna de París se desarrollan las principales tesis de la doctrina marxista sobre el Estado y la revolución, hace las siguientes referencias:
El poder estatal centralizado, con sus órganos omnipresentes: el ejército permanente, la policía, la burocracia, el clero y la magistratura –órganos creados con arreglo a un plan de división sistemática y jerárquica del trabajo– procede de los tiempos de la monarquía […] Al paso que los progresos de la moderna industria desarrollan, ensanchan y profundizan el antagonismo de clase entre el capital y el trabajo, el poder del Estado fue adquiriendo cada vez más el carácter de poder nacional del capital sobre el trabajo, de fuerza pública organizada para la esclavización social, máquina del despotismo de clase...
Por su parte, Lenin en El Estado y la revolución hace una caracterización del estado, resaltando los rasgos siguientes:
El Estado, es decir todo Estado, es un instrumento para la opresión de una clase por otra (…) es un órgano de dominación de clase, un órgano de opresión de una clase por otra, es la creación del “orden” que legaliza y afianza esta opresión, amortiguando los choques entre las clases (…) es el órgano de dominación de una determinada clase, la cual no puede conciliarse con su antípoda (con la clase contrapuesta a ella)...
Es decir que en esencia el Estado es un instrumento de dominación y control de clase, y cada formación económico-social basada en la división de la sociedad en clases sociales (esclavismo, feudalismo, capitalismo) ha adoptado su forma específica de Estado, a la cabeza del cual se ha colocado la clase dominante y dirigente de la sociedad, llámese esclavista, nobleza feudal o burguesía (capitalista), en la figura de faraones, sátrapas, reyes, emperadores o presidentes de repúblicas, entre otras. El marxismo plantea que durante la etapa revolucionaria de transición del capitalismo al socialismo, forzosamente persistirán algunos rasgos de la sociedad capitalista al tiempo que van surgiendo los nuevos rasgos de la sociedad socialista, lo que Gramsci ilustró con la idea de algo que esta naciendo pero no ha terminado de nacer y algo que está muriendo pero no ha terminado de morir y se resiste a ello.
Uno de esos rasgos es la división aún de la sociedad en clases y capas sociales con distintos intereses, algunos de ellos de antagónicamente opuestos, como en el caso de la burguesía, por un lado, cuyos privilegios y posición dominante son erradicados o al menos disminuidos en forma gradual, la cual, lógica y objetivamente se opondrá con todos los medios a su disposición (y mientras mas medios se deje en sus manos tanto más poder tendrá para oponerse), y por otro lado, la clase trabajadora ahora en posición de clase dirigente que tiene que ejercer el poder para mantener a raya a esa burguesía, imponerle las nuevas leyes y la preeminencia de los intereses de la mayoría trabajadora, si no quiere caer víctima de la contra-revolución violenta, lo que implica también la persistencia del Estado mientras persista la división de la sociedad en clases antagónicas, solo que en la forma específica de Estado que le es propia a la transición del capitalismo al socialismo, la forma específica de Estado de la clase trabajadora como clase dirigente de la sociedad.
A la luz de la teoría revolucionaria ¿Cuál debe ser entonces la actitud de los socialistas y las socialistas frente al Estado? Al analizar la experiencia de la Comuna de París, Marx saca la conclusión de que “la clase obrera no puede limitarse simplemente a tomar posesión de la máquina del Estado tal y como está y servirse de ella para sus propios fines”. El proletariado debe destruirla y sustituirla con un Estado del tipo de la Comuna de París. Esta conclusión de Marx acerca del Estado de nuevo tipo constituye el contenido principal de su nueva aportación a la teoría revolucionaria.
Si vemos el caso de la revolución socialista bolivariana a la luz de la teoría es fácil confirmar que las premisas del marxismo respecto al Estado se han cumplido en cuanto concierne al uso que hizo y hace la burguesía de él cuando lo tiene bajo su poder y de la violencia con que se le enfrenta cuando no, pero también queda en evidencia lo corto que nos hemos quedado en el campo socialista en cuanto a las tareas a realizar respecto al Estado y el uso que debemos hacer de él, toda vez que tanto en la doctrina del PSUV como legalmente hemos acogido el concepto de la Comuna y del Estado Comunal como carta de navegación en esta materia tan vital, hacia -al decir de Marx- “la forma política al fin descubierta para llevar a cabo dentro de ella la emancipación económica del trabajo”. ¿Acaso hemos cumplido a fondo estos postulados? ¿O es que hay otro esquema teórico guiando a la revolución?

Esperemos que este tema, de tanta urgencia y necesidad práctica para acometer victoriosamente las tareas estructurales y estructurantes de la revolución bolivariana sea materia de discusión en el venidero IV Congreso del PSUV.